Martes 15 de febrero 10:25 pm.
Anecdota con alcohol y sangre.
Hace frio, estoy sentado a la orilla de la calle Melgar en mi trabajo los dedos de la mano derecha se me congelan por estar sosteniendo un libro de Carlos fuentes que se resiste a entenderlo, lo que si he comprendido es que Mexicali al igual que el Distrito Federal, existe una cierta similitud al denominarse como la Region mas transparente, ya que ambas comparten los dos fenomenos sociales que denigran este pais: la corrupcion y la ignorancia...
Mi lectura se vio interrumpuida cuando llego un cliente pidiendo uno de bisteck con papas y una coca de vidrio, segun el la coca de botella sabe mas sabrosa que porque conserva mas el gas y el vidrio mantiene el liquido frio. Me sorprendi porque el tipo se veia como de dos metros y 150 kilos de personalidad mal encardada y seria como la de los guardias de la Taberna cuando el estres y la gente alcoholizada se apodera de ellos, en fin, no venia solo su esposa lo acompañaba en una camioneta blanca ella se quedo arriba por lo siguiente:
Un borracito sin darse cuenta el marido molesto a la mujer arriba, la insulto, no la dejaba bajar, le dio de golpes a la ventana, el cliente se entero despues de escasos 5 minutos porque su mujer estaba vuelta un mar de lagrimas histericas, el tipo con la mandibula apretada y las cejas fruncidas fue a buscar aquel alcoholico para saldar cuentas con la violencia y el respeto. Cincuenta metros mas adelante recargado en la puerta del Bar Evas con la mirada perdida sin saber a donde ir estaba el borracho como el de la imagen de la loteria, la frase de batalla del mexicano cuando se avecina un pleito es "que onda"... El portento de dos metros le dio un puñetazo al pobre sacudiendole el alcohol evaporizado en las neuronas estreyandolo de cara en una silla metalica de bolero toda descolorida, quedando tendido en el piso pidiendo la classica plegaria "hay fue"... ya por ultimo su cara recibio un pizoton como si el cliente hubiera matado un raton o una cucaracha...
El borracho quedo con un corte en la ceja que mas bien en vez de corte parecia zanja, el pomulo inflamado y la nuca descalabrada, y el cliente solo agarro su coche todo histerico regañando a su mujer por no avisarle se marcho y para colmo ni me pago...
El borracho quedo con un corte en la ceja que mas bien en vez de corte parecia zanja, el pomulo inflamado y la nuca descalabrada, y el cliente solo agarro su coche todo histerico regañando a su mujer por no avisarle se marcho y para colmo ni me pago...
